La ubicación del hotel es perfecta, cerca del centro. El café del desayuno no funcionó bien durante mi estancia.

Una experiencia increíble

La habitación era muy cómoda y limpia, y cada día nos dejaban agua fresca. La atención en la recepción fue genial, siempre dispuestos a aconsejarnos. El desayuno era rico, especialmente el baklava y el té. Solo un pequeño detalle, el wifi era un poco inestable a veces.

Atención amable y desayuno variado

La ubicación es perfecta, a un paso de las principales atracciones. El desayuno casero, lleno de opciones locales, fue un verdadero festín que marcó el inicio de cada día.

el desayuno no tenía café, solo té, y el personal parecía no tener idea de lo que hacía. además, cuando intenté pagar con tarjeta, su datáfono mágicamente dejó de funcionar. esperaba al menos un pequeño detalle en mi habitación, pero parece que eso es demasiado pedir.

Es un hotel encantador con habitaciones impecables y un personal excepcionalmente amable, y un desayuno abundante y delicioso.

La ubicación es inmejorable, a poca distancia de los principales puntos turísticos y rodeado de restaurantes locales. Las habitaciones son amplias y muy cómodas, y la decoración tradicional agrega un toque especial a la estancia. El desayuno es exquisito, ofreciendo una variedad de platos locales que hacen que empieces el día con energía.

Hubo un pequeño inconveniente con la limpieza de la habitación durante nuestra estancia.

decoración espectacular, patio central bonito, habitaciones amplias

Faltó un poco de atención a los detalles en la limpieza de la habitación y en la disponibilidad de productos de aseo. El ascensor es un poco incómodo y debería ser más accesible para todos. ¡Mejorar eso sería genial!!!

Desayuno variado y rico.

La habitación era amplia y muy limpia. el personal fue increíblemente amable, siempre dispuesto a ayudar. La ubicación estaba al lado de todo lo que queríamos ver.

Para nosotros fue ideal.

la arquitectura impresionante y la atención del personal que te hace sentir como en casa son el alma de al-hayat

El propietario fue increíblemente amable, compartiendo historias sobre el hotel y la ciudad. Las habitaciones son espaciosas y cómodas. El desayuno local es una delicia que no te puedes perder.

Es un hotel encantador con una decoración islámica hermosa. El patio interior y la atención al detalle hacen que te sientas en casa. ¡La habitación era un sueño!

El colchón era más duro que el pan de piedra, ¡y el minibar ni siquiera se dignó a funcionar!

Increíble experiencia! La decoración típica uzbeka en las habitaciones es impresionante y el desayuno es un festín con opciones riquísimas como el baklava. Volvería sin dudarlo.

El hotel Al-Hayat es un lugar maravilloso con habitaciones amplias y una decoración impresionante. La cama era muy cómoda y el WiFi funcionaba perfectamente. Además, el desayuno es un festín, un montón de frutas frescas, opciones de platos locales y un delicioso baklava. La ubicación es inmejorable, a solo unos minutos a pie de las principales atracciones y rodeado de restaurantes agradables. El personal fue extremadamente amable, siempre dispuesto a ayudar con recomendaciones y necesidades de transporte.

Sin embargo, el café del desayuno no estuvo disponible durante mi estancia, lo cual fue un poco decepcionante. noté que el minibar no funcionaba bien, lo que podría mejorar.